31 marzo 2010

el destino...

Ultimamente estoy con un ataque severo de ocio. Sea como sea, encuentro dos horas para estar grotescamente al pedo, asique me doy una vuelta por el dpto de alguna amiga ovarica o tomo una coca (como si tuviera 16 todavía) en la plaza con mejor amigo (esto merece un post aparte).

En fin, tardes al pedo, charlas amenas, mucho mate, poco tiempo cerebral para el histerico. Pero te llama, y vos no atendiste el telefono. SUPERADA??? puedo aparentarlo pero... jamás!!!
Simplemente el celular estaba en lo más profundo del bolso/cartera, que tiene dimensiones lo suficientemente grandes como para que te puedas robar media góndola de supermercado sin que nadie se altere. Y evidentemente, no encontraste el celular entre las 1500 boludeces que tenes adentro de esa cartera, por más que le hayas puesto el volúmen al máximo y el ringtone más escandaloso del mundo.

En fin. Llamada perdida, no una. DOS. Merece un mensajito al menos.
Sale mensajito. Entra silencio.
Silencio de un minuto.
Silencio de dos, cinco, diez. Y te resignaste a esperar la llamada del idiota. Seguis con la ronda de mates.

Y ahí pasa.
El hijo de mil puta del mal parido servidor de personal te manda un mensaje.
"El destino 351*+++*** no contesta. Compruebe la numeración"

Eso y que venga la más mononeuronal de las vedettes de turno a entregarte el premio nobel a la boluda, es más o menos lo mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario